Vale, tal vez, sea más saludable andar barefoot que con un calzado convencional, pero, ¿se puede hacer deporte con este calzado y, además, ser competitivo? Y, si ello fuera cierto, ¿Por qué no lo llevan todos los profesionales? ¿Y no es mejor la amortiguación?
Éstas son preguntas que también resolvemos a diario en 5Dedos. Arrojar luz sobre este tema es nuestro día a día y nos gustaría que leyeras "Nacidos para correr" de Christopher Mc Dougall, pero vamos a hacerte un pequeño spoiler:
"Las zapatillas bloquean el dolor, no el impacto! El dolor nos enseña a correr cómodamente. Desde el momento en que empieces a andar descalzo cambiará tu forma de correr".
En esta "biblia del minimalismo" que explica la historia de los indios tarahumaras de las Barrancas del Cobre de México, que son los corredores de larga distancia con desnivel más rápidos del planeta corriendo sólo con unas sandalias huaraches, se esboza el engaño de la industria del calzado deportivo desde los años 70 y las primeras cámaras de aire.
Una vez más, la respuesta a vuestras dudas está en la moda y los intereses económicos asociados (véase industria ortopédica, marcas del calzado deportivo).
Si, después de esta lectura, queréis profundizar en el tema, consultadnos y estaremos encantados de entrar en materia.
A modo de conclusión y parafraseando al gran Jordi Vizcaíno de
@feetness_run "
La comodidad lleva a la despreocupación. La despreocupación a la dejadez. La dejadez a la debilidad y la debilidad al dolor"